Senin, 06 Februari 2017

“Un lazo color lavanda" - Heather Burch



Tanto el título como la portada con ese fajo de cartas antiguas unidas por un lazo de terciopelo morado llamaron poderosamente mi atención. Luego, el ver que era una historia que tenía que ver con la Segunda Guerra Mundial me acabó de convencer

Éstas son mis impresiones



Heather Burch

Heather Burch siempre ha sentido una gran atracción por las historias épicas de amor y de pérdida. Ha escrito una gran variedad de obras: desde sagas de amor perdido y reencontrado, hasta novelas de aventuras para jóvenes adultos. Pero toda su obra tiene un tema común: ella lo define como el «factor del alma gemela». Así que, sumérgete en sus libros y disfruta del viaje con sus personajes inolvidables. Tanto si están salvando el mundo como su propia vida, los personajes encuentran su fuerza interior y lo arriesgan todo para hallar ese algo tan elusivo que llamamos amor. Heather vive en Florida, donde se dedica de lleno al oficio de escritora y mantiene conversaciones con personas ficticias. Todos. Los. Días.



Datos técnicos

Título: “Un lazo color lavanda"

Autora: Heather Burch

Editorial: Amazon Crossing

Edición: de bolsillo, tapa blanda sin solapas

Publicado en abril de 2016

358 páginas

ISBN: 9781503933910

Precio: 9,49 € en papel / 3,99 euros en digital


Argumento

Una mujer con el corazón roto encuentra una pila de cartas de amor de un héroe de la Segunda Guerra Mundial, ocultas durante décadas. ¿Le permitirán recuperar la fe en el amor?

Adrienne Carter abandona Chicago para recuperarse de un divorcio amargo y busca refugio en el sol, la arena y la belleza del sur de Florida con la intención de remodelar una casa victoriana deteriorada, situada en la playa. Al inicio de su remodelación encuentra una caja de hojalata oculta en el desván que contiene unas cartas muy emotivas escritas por un paracaidista de la Segunda Guerra Mundial a una joven mujer que vivió en la casa más de medio siglo atrás.

Las viejas cartas, cargadas de romanticismo y de un tono muy poético, trascienden el tiempo y despiertan en Adrienne una curiosidad que la lleva a buscar al autor. William «Pops» Bryant ya es un hombre mayor que vive en un pueblo cercano con su nieto, Will, muy apuesto pero demasiado sobreprotector. Mientras Adrienne empieza a desenredar los secretos de las cartas (y de la familia Bryant), descubre que no quiere renunciar al amor.


Impresiones

Adrienne es una mujer joven que acaba de divorciarse. Tras un matrimonio en el que ella dejó todo por él, un prestigioso médico, se encuentra perdida. Decide dar un giro de 180 grados a su vida y compra, por puro impulso, una gran casa victoriana en un lugar de la costa de Florida. Si bien se encuentra muy deteriorada, va a ser ella misma quien se encargará, poco a poco, de reformarla. Precisamente haciendo esto, encuentra un fajo de cartas atadas con un lazo morado y se pone a leer la primera del montón. Las palabras del remitente, un soldado que se encuentra en Francia en plena Segunda Guerra Mundial y escribe a su novia, calan hondo en su corazón. Son palabras sensibles, llenas de amor. Adrienne no puede evitar seguir leyendo las cartas y, finalmente, decide averiguar si ese hombre vive aún; parece ser que la mujer a la que iban dirigidas vivía en la que ahora en su casa y que la casa del entonces joven no estaba demasiado lejos. Pronto le encuentra: William “Pops” Bryant es un hombre ya anciano, que vive con su hijo Will, un joven muy apuesto que le cuida con mucho cariño. Adrienne ser hará amiga de los dos.

Siempre me han gustado las historias de la Segunda Guerra Mundial. Es una época que, desgraciadamente, da para mucho literariamente hablando, para historias llenas de intriga, aventuras, heroicismos, maldades y, sobre todo, mucha emoción. Además, casi siempre los autores consiguen dan a sus novelas un aire distinto.

Heather Burch afronta la guerra desde la actualidad. No vamos a trasladarnos a aquellos años salvo a través de las cartas de William a Grace, ya que toda la novela transcurre en tiempo presente. No obstante, la guerra es una de las protagonistas de la historia. La autora lo hace a través de diferentes cartas que transcribe literalmente y en su integridad. En ellas, William describe a su novia lo que es el día a día de un soldado (un paracaidista) estadounidense que se ha enrolado en el ejército para acudir a Europa a luchar contra los nazis y así conseguir puntos frente a la familia de Grace que no siente simpatías por él. Nos va a trasladar los horrores de la guerra pero sin hacer uso de un excesivo dramatismo. La autora no pretende hacer una novela lacrimógena –y no lo es- pero sí emotiva: pero emociones más que derivadas del horror y el dolor, derivadas del amor. Y es que William es un hombre sumamente sensible, muy enamorado de Gracie y sus cartas son puro amor; da gusto leerlas.

El amor va a estar muy presente en la novela, tanto en el pasado como en el futuro. Obviamente, asistiremos a la historia de amor de William y Grace sabiendo desde el principio que algo no debió salir bien porque él es viudo pero no de Grace sino de otra mujer. Tendremos que saber qué pasó para que un amor tan grande no llegara a buen término. También tendremos una historia de amor en el presente, una historia complicada por el carácter de sus protagonistas y lo dolido que está uno de ellos y bastante previsible aunque, eso sí, bonita. Personalmente, me ha gustado más la historia del pasado pero eso era de prever; por las circunstancias y la época pero también porque guarda secretos mientras que la del presente es, como digo, más previsible. Pero bueno, en todo caso, ambas son bonitas y me ha gustado conocerlas

Los personajes son entrañables, especialmente Adrienne, William y Sara (un personaje que no he mencionado pero que tendréis que descubrir por vosotros mismos). Con Will he tenido mis más y mis menos, como Adrienne, pero en general me ha gustado ya que todo lo que hace lo hace por proteger a su querido abuelo. En general están bastante bien desarrollados, especialmente Adrienne cuyos sentimientos conoceremos de primera mano.

Heather Burch tiene un estilo sencillo y ágil. Quizás habría que pulir un poco algunas repeticiones y algunas frases demasiado sencillas pero la verdad es que es un libro que se lee a gusto y que me ha dejado buen sabor de boca. Hay bastante diálogo y eso hace que la lectura sea amena y ágil. Será un narrador omnisciente quien nos cuente la historia, focalizando especialmente en Adrienne y sus sentimientos. Salvo en los casos en los que es William, a través de sus cartas y en primera persona, quien nos abre su corazón.

Es una novela que va de menos a más. Al principio no me dijo nada especial pero lo cierto es que acabé enredada en sus historias y disfrutándola mucho

Destaca la ambientación en un lugar que parece paradisíaco.



Conclusión final

“Un lazo color lavanda” ha resultado ser una novela sencilla, entretenida y entrañable, llena de amor pero no empalagosa, que me ha gustado leer

Podéis comprarla en Amazon tanto en papel como en digital siguiendo los siguientes enlaces:



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